Parte fundamental de la historia de la ciudad de Valdivia es la fábrica de cerveza Anwandter (1855-1960). Durante el periodo de funcionamiento de la empresa, se sucedieron en Chile doce de los mayores terremotos. Numéricamente, estos sismos coinciden con la forma en que se comercializó la producción de cerveza de la empresa, cajas de doce botellas.
A partir de este cruce de relatos surge Kastastrophe II, una instalación que pone en diálogo la historia sísmica del país y la historia industrial de una ciudad. Bajo estas lógicas, la catástrofe emerge como una posibilidad de reconfiguración del pasado.
La instalación estuvo compuesta por líneas zigzagueantes pintadas de color celestre en los cuatro muros divisores de la sala. Sobre estas se dispusieron 12 botellas previamente cortadas y reconstruidas en ambas caras de los muros. Cada botella llevaba una etiqueta con la fecha y lugar de los 12 sismos más importantes ocurridos en el país.
Katastrophe II fue exhibida en el marco de la exposición Arte & Catástrofe, muestra colectiva exhibida en el Museo de Arte Contemporáneo de Valdivia.